Al paciente se le aplican gotas anestésicas, el cirujano utiliza una aguja extremadamente fina directamente en el ojo sin causar dolor al paciente y es realizada en segundos. Se inyecta el medicamento a través de la esclera hacia la cavidad vítrea sin dañar las estructuras oculares (Pars Plana).Luego, se le coloca un parche al paciente y dependiendo de su evaluación y evolución se aplican o no otras dosis sucesivas.